pasa dijo la señora que de negro me veia como iba yo vestida.
de negro , me sali de la escuela de magia y fui a la casa de una hèxe a que me leyeran las cartas , oye...se puede no? en escoba y con capa , viaje sobre del mar, a la natiguita y con calma lleguè con puntualidad inglesa, la casita era una pequeñez solo que todo de negro hasta el piso y el gato y la vajilla, las servilletas y todo asi con velas, nos sentamos en esa buhardilla olia a ardillas que leian la suerte, las hèxe suelen ser decididamente rapidas en adivinar que trae uno, cuando las cartas azotò en la mesa con prestez un eructo salio de mi
es como si con sus movimientos de manos hiciera de ajos
me saco, a risa , el llanto, la duda, el espanto
vives asustada de tu mundo? dijo...por que vives sola
es que este va a cambair, has ido antes a que te lean la suerte no has creido?
no quieres saber màs, que niña mas inteligente no es malo saber màs
que acaso la diosa lo prohibe? ese era odin que no queria que supieran donde andaba ni entre que piernas y asi sus hijos, tu no, se rio de mi cara a la vez que leia las cartas abria los ojos de verdad y mira, sorbia su tacita de the que yo me acabe en un santiamèn del nervio agudo , cuando su gata me toco la mano , sentì que era un presagio , me animaba a que callara mi orazon qu epalpitaba como tambor, es terrible ser una cartomaniana en mesa de otra desnudada....todo me dijo y al final
señalò ...se acabò la soledad
uy!
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